jueves, 4 de febrero de 2016

Suspenden temporalmente las conversaciones de paz sobre Siria.

El tercer intento de conversaciones de paz sobre Siria en Ginebra duró apenas 48 horas. Dos días después de anunciar el «inicio oficial» del proceso, el enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Staffan de Mistura, se vio obligado a declarar un «cese temporal» como mínimo hasta el 25 de febrero porque «queda mucho trabajo por hacer».
De Mistura no quiso hablar de «fracaso» y lanzó la pelota a Estados Unidos y Rusia a quienes instó a reunirse de forma inmediata para abordar cuestiones como la del alto el fuego, algo que el diplomático italiano considera imprescindible para poder seguir adelante.

El alto el fuego no solo no ha acompañado a las conversaciones de Ginebra, sino que en la última semana el Ejército sirio ha ganado terreno al norte del país y el anuncio del «cese temporal» del proceso de Ginebra coincidió con la noticia del corte de la principal vía de suministro de la oposición armada entre Alepo y Turquía, según revelaron fuentes militares a la agencia AFP. Los soldados de Bashar Al Assad habrían logrado además romper los cercos que sufrían Nubul y Al Zahrá, pueblos de mayoría chií que permanecían leales a Damasco, según la agencia oficial Sana.

Bashar Al Jafari, enviado de Siria a la ONU y responsable de la delegación enviada por Damasco a Ginebra, dijo que la decisión de De Mistura era solo una forma de justificar la retirada por parte de unos opositores que habrían decidido abandonar el proceso siguiendo las órdenes de Arabia Saudí, Catar y Turquía.

La ofensiva por la segunda ciudad del país se produce con la cobertura aérea de Rusia, que realizó «intensos bombardeos», según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), que permitieron al Ejército su mayor avance en el frente de Alepo desde que la mitad de la ciudad cayera en manos de la oposición en 2012. Los opositores denunciaron la muerte de al menos 300 civiles en los bombardeos realizados por el régimen y Rusia desde el viernes, fecha en la que llegaron las primeras delegaciones hasta al ciudad suiza.

La oposición, que acudió a Ginebra por la presión de Estados Unidos pero que se negaba a negociar hasta que acabaran los bombardeos y los cercos, ya canceló las reuniones del martes en señal de protesta por los «bombardeos sin precedentes» de Rusia sobre Alepo que «amenazan al proceso político desde el primer momento», según el comunicado que hicieron público. Una postura a la que respondió de forma inmediata el ministro de Exteriores, Sergei Lavrov, quien dejó claro que su país «no tiene intención de detener los ataques hasta que sean derrotadas organizaciones terroristas como el Frente Al Nusra (brazo de Al Qaeda en Siria)». Tanto este grupo, que es muy fuerte en Alepo, como el grupo yihadista Estado Islámico (EI) están excluidos de las negociaciones de Ginebra, a donde tampoco han sido invitados los kurdos del PYD por la presión de Turquía, que les considera «terroristas» por su vinculación con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

No hay comentarios:

Publicar un comentario