Washington (CNN) – Un antiguo investigador del Comité Selecto de la Cámara de Representantes que investiga el ataque al consulado estadounidense en Bengasi está acusando al panel, liderado por los republicanos, de realizar una pesquisa con motivación política que tiene en la mira a Hillary Clinton.
El comandante Bradley Podliska, un oficial de inteligencia en la Reserva de la Fuerza Aérea quien se describe a sí mismo como un republicano conservador, le dijo a CNN que el comité ha puesto sus ojos contra la exsecretaria de Estado Clinton casi de manera exclusiva, en lugar de trabajar en su meticulosa misión de encontrar los hechos objetivos para la que fue establecido.
En marzo, se reveló que Clinton usaba un servidor privado para enviar correos electrónicos durante su ejercicio como secretaria de Estado.
Ese nuevo enfoque le dio vuelta a una amplia investigación acerca del ataque del 11 de septiembre de 2012 contra el consulado en Bengasi, hacia lo que Podliska describió como "una investigación sesgada".
Podliska, quien fue despedido después de casi 10 meses como investigador para la mayoría republicana, se está preparando para presentar una demanda contra el Comité Selecto.
Afirma que perdió su trabajo, en parte, porque se resistió a la presión de enfocar sus esfuerzos de investigación únicamente en el Departamento de Estado y el papel de Clinton que rodea el ataque en Bengasi.
También asegura que fue despedido porque tomó una licencia del comité para cumplir con sus obligaciones militares, lo que sería un despido ilegal.
"Sabía que teníamos que llegar hasta la verdad por las familias de las víctimas. Y las familias de las víctimas merecen la verdad, ya sea que Hillary Clinton haya estado involucrada o no, ya sea que otras personas hayan estado involucradas o no", le dijo a CNN en una entrevista de televisión exclusiva transmitida en el programa "State of the Union".
"Las familias de las víctimas no obtendrán la verdad y eso es lo más lamentable de esto", dijo.
Podliska le dijo a CNN que el comité, que hasta ahora ha gastado 4,6 millones de dólares y que está presidido por el representante republicano por Carolina del Sur, Trey Gowdy, sacó ventaja de los recursos de sondeos de otros individuos y agencias para enfocarse casi exclusivamente en Clinton y en el Departamento de Estado del que ella estuvo a cargo durante cuatro años.
Clinton testificará ante el comité por primera vez el 22 de octubre y el comité está listo para hacer públicos los hallazgos de su investigación el próximo año, en el fragor de la contienda presidencial.
Podliska afirma que el director de personal del comité le dijo que estaba despedido por tres razones: usar el correo electrónico del trabajo para enviarle una invitación social a los colegas, asignarle un "proyecto no autorizado" a un interno y, al parecer, colocar información clasificada en un sistema no clasificado.
El oficial de inteligencia fue contratado por su pericia con la comunidad de inteligencia y niega rotundamente la última acusación en su contra.
También cuestionó la legitimidad de las otras dos razones que el comité le mencionó, en particular, la asignación de "proyectos no autorizadas" a los internos.
Un portavoz del comité negó "enérgicamente" las acusaciones de Podliska acerca de las razones por las que fue despedido y defendió la objetividad de la investigación del panel.
"Estamos seguros de que los hechos y las pruebas no sustentan la salvaje imaginación que alimenta estas y cualquier otra acusación futura, y el comité se defenderá enérgicamente contra tales acusaciones.
"El comité no será chantajeado para llegar a un acuerdo monetario por una acusación falsa hecha por un antiguo empleado que fue despedido apropiadamente", le dijo un vocero del comité a CNN.
Podliska sostiene que tiene miedo y explica así sus razones: "Estoy nervioso. Sé lo que esto significa, ya sabes, me estoy enfrentando a personas poderosas en Washington. Pero, al final del día, tengo que estar a cuentas conmigo mismo", explicó.
"Le dije a mi esposa, personalmente que me sentiré como un cobarde si no hago lo correcto en esta situación".
La campaña Clinton catalogó como una farsa a la investigación del comité del congreso sobre el caso Bengasi, dominado por los republicanos por su parcialidad contra la exsecretaria de Estado y exsenadora demócrata.
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